Por MARÍA GUADALUPE RICO
MARTÍNEZ
Es una vergüenza para la
humanidad que tras 20 años de descensos en las estadísticas de hambre en el
mundo, la crisis vuelve a activarse debido a las vicisitudes que reinan en
países sometidos a guerras civiles provocando que Hambre Cero uno de los
Objetivos del Desarrollo Sostenible planteado por la Organización de las
Naciones Unidas se aleje cada día más de su meta.
Un Informe dado a conocer por la Organización no
Gubernamental Acción contra el Hambre pone sobre aviso del peligro de muerte en
800 millones de individuos, 6 de cada 10 viven en zonas de violencia. Tristemente
del total, 122 millones son menores de edad que sin lugar a dudas no alcanzarán
la adultez a menos apresuren nuevas alternativas.
Es conocido, en áreas de
disputa, ejemplos en Somalia y República del Congo en ocasiones, comestibles
los convierten en instrumento. A sinnúmero de combatientes los obligan sus adversarios
a deponer las armas a cambio de alimentos. Otros factores, la contaminación en
pozos de agua o la destrucción de mercados locales, así también, suele
condicionarse a los agricultores a abandonar sus tierras; de ahí una de las
causas principales de las crisis migratorias.
Pero no solo las guerras provocan hambre,
asimismo inciden: la pobreza, los fenómenos naturales (ciclones, tormentas
tropicales, largos periodos de sequía), falta de infraestructura agrícola como
son los silos, sistema vial y de irrigación. Economistas de la Organización de las
Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) consideran que
cumplir con el Objetivo del Desarrollo Sostenible, Hambre Cero se requiere invertir
por año a 2030 la suma cercana a los
226.000 millones de euros.
Ojalá,
el mes entrante en la
Conferencia de la ONU sobre el Cambio Climático COP23 en la ciudad alemana de
Bonn, lleguen a pacto de paliar la hambruna porque son 117 países -colocados en
su mayor parte en el continente africano- bajo el yugo de uno de los Cuatro
Jinetes del Apocalipsis, que en pleno siglo XXI debería ser una materia sino inexistente
por lo menos, sí aminorada.
GUERRA.- Loable más que
nunca la entrega del premio Nobel de la Paz a la Campaña Internacional para la
Abolición de las Armas Nucleares (ICAN), por su trabajo para llamar la atención
sobre las catastróficas consecuencias humanitarias de cualquier uso de armas
nucleares.
https://verdeclaronoticias.blogspot.mx/
0 comentarios:
Publicar un comentario